Los chilenos estamos acostumbrados a vivir de manera individual e interactuar escasamente dentro de la colectividad. Para fomentar el cooperativismo, nosotros, un equipo joven e interdisciplinario, queremos utilizar el café como excusa para crear un primer punto de reunión. A través de un modelo de negocios eficiente, el Café B, y sustentando nuestra idea en la filosofía “doy para que des” buscamos crear una estructura rentable para financiar una comunidad autosustentable, que apoye el arte y desarrolle una red de talleres artísticos y deportivos para niños en situación de riesgo social. Desde nuestra inquietud por compartir y generar lazos profundos queremos irrumpir con los modelos actuales construyendo física, virtual y simbólicamente nuevos espacios de vinculación, pertenencia y cooperación, pensados para todos quienes deseen conocer nuevas formas de generar comunidad y sentirse miembros de un colectivo sólido y comprometido en lo cultural y social.